jueves, 6 de marzo de 2008

¡Hola! ¿Como estas? / Y.... AHORA BIEN (Mandinga en tan solo diez letras y tres palabras)


Me considero un tipo capaz de escuchar sin llegar a incomodar por mi silencio o por la invasion del desinteres, a una mujer. Mis niveles de caballerosidad para con ellas rondan lo normal pero inclinandome hacia algunos limites superiores. La paciencia juega un rol fundamental, obviamente, puesto que sin ella, quizas al menor indicio de problematica domestica la ignoraria con mi cara de piedra.
¿Solidario? no se. Tampoco me autoetiqueto de diferentes maneras para sentirme bien. La cosa es simple. Escucho y hablo cuando debo. Si le gusta, bien y si no a otra cosa mariposa. No soy un tipo directo por lo que antes de responder pienso que palabra usar para no ser duro y dependiendo de la intensidad y/o profundidad con la que llegue a mi corazon decido como expresarme. A ellas les gusta que las escuchen, por mas que a veces exageren en el uso de las palabras.
En fin, un tipo, segun mi punto de vista, normal.
Pero cuando ves que no hay onda, que las cosas se repiten, que cada vez que la encontras, la situacion es la misma nubecita gris sobre su cabeza con cierto chaparron constante, con rayos y truenos y rayos, murcielagos revoloteando a su alrededor y te responde de la misma manera al saludarla con un "Hola ¿como estas?, yo me quiero matar.
Mi "Hola ¿Como estas?" en realidad no se porque sale. Quizas deberia decir simplemente"¿Que acelga?" seguido de un desconcertante "¿Que onda?" o en caso mas extremo "¿Como te baila?"
Pero recibir como respuesta a mi "Hola, ¿como estas?" el clasico de la histeria femenina, el pilar de la existencia de un hipocondriaco, el primer mandamiento del pesimista, un terrorifico "Y... AHORA BIEN...." me liquida. Asi como lo ves, con puntitos suspensivos al final.
Esta respuesta me mata, me obliga ir hacia el suicidio, hacia el abismo, hacia un agujero negro que te tragara sin saber a donde cuernos vas a ir a parar. Me siento como Jack Nicholson en "Atrapados sin salida". No hay escapatoria salvo responda con frialdad calculadora y reaccionaria un "Uhhh che ¿que me contas con esto de Ecuador y Colombia?". Pero no, te lleva alli , a darle la oportunidad a ella de sacar de sus adentros todo lo que ella crea necesario sin ningun tipo de consideracion.
El mundo se paraliza y el tiempo se detiene.
Fuiste. Comienza la historia y no paras mas y todo se asemeja a estar amordazado en una butaca viendo sin descanso ni pausas King Kong pero de 8 horas. Se hace interminable.
Que se quemo con cera la entrepierna por mirar "Pasion de Gavilanes", "Carita de Angel" o novela mexicana de turno, que sufre de gastritis o colitis aguda, que no consiguio el esmalte para hacerse la francesita o que su marido, despues de 25 años de casados, no la conoce y sigue insistiendo en regalarle zapatos horrendos con grandes ruches en el empeine y encima color cafe con leche en vez de un buen par de zapatillas para el gimnasio. Y lo peor que lo hace con conviccion.
Nunca una inflacion, o que la carne sube 20%, o que no hay casa y que la clase media en realidad no existe y somos un simple fantasma que inventa el sistema financiero para hacernos creer que todavia seguimos bien, que la palabra aumento sirve para todo meno para los salarios, que la gente se reproduce como conejos y en un par de años esto nos va a quedar chico a todos y vamos a tener que mudarnos, pero a Marte por lo que hay que apurar la exploracion o que "El dia despues de mañana" no involucra de ninguna manera la escazes de galletitas ligth, de tinturas para el pelo o la perdida de una hora de gimnasio.
Las reacciones internas son increibles, porque a la vez que las palabras suenan, por mis adentros van varias peliculas generadas en el poderoso centro de mi imaginacion. ¿De que me hablas? ¿eso te pone mal? ¿Para tanto es? y un sin fin de cuestionamientos de si realmente el padecer es padecer o simplemente ganas de hinchar las pelotas para captar algo de atencion o, caso peor, estar vacia.
Pero eso no importa. El desafio esta en no caer en la vulgaridad, en no ser grosero y usar la astucia con sabiduria y de una manera sutil, delicada y bien pensada, salir del enriedo.
A veces el tiempo es el verdadero y unico bien no renovable.
Y perderlo cuesta.
La vida.

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