Mi querida mujer se llama Nila Frida pero de chica le decian cariñosamente Mila Frita. La conoci alla por el 89 cuando yo tenia 18 y ella 23. El destino quizo que nos cruzaramos en Posadas, Misiones en un viaje de ocio y recreacion que fue mucho mas que eso. Una especie de "laguna azul" pero en Misiones y con cataratas y ruinas jesuitas.
A partir de ese setiembre la cosas cambiaron radicalmente. Todo era color rosa, visitas, noviazgo, flores, perdidas de colectivos y por lo tanto trajineada a casa, besos y arrumacos detras de la puerta, dias, tardes, noches sentados charlando, besandonos o aprentando tan fuerte pero tan fuerte en medio del silencio, la lluvia, el viento, los rayos que nos tenian que separar con martillo y cincel.
En verdad nada importaba. Todo estaba anestesiado por el amor, la obnuvilacion, la contemplacion y que se yo que pajaroneo mas de esa edad.
Entrar a la casa de nuestra pareja suele ser desafiante, tiene ese rito del "Uy que diran", "como seran" y te pones en el papel de formal, de cauto al mismo tiempo que tragas saliva. Vas arregladito como novio de torta de casamiento y el lugar que conocerias por varios meses consecutivos seria la sala de estar, el living o la antesala, ahi donde te hacen sentar luego de abrir la puerta de calle.
Ahora no, a los mocosos no les importa un pomo, van y entran asi como asi, abren la heladera, te quitan el control remoto y se sientan a ver MTV o la Chica FX en tu sillon preferido, se duermen en tu cama y se toman tu cerveza.
Atravesar el portal de Las Heras 1437 fue llegar a otra dimension.
Ahi me di cuenta de como el amor te vuelve ciego y no pude ver, al final de la planilla prontuarial de mi amada, abajo, con letras chiquitas que decia casi escondida y en cursiva. Familia: SI Hermanos: 10
Nadie te avisa cuando te pones de novio, como esta conformada su familia, no te importa, vas al frente como el Quijote hacia el molino, sin saber que como es y listo el pollo, un adelantado, un cruzado buscando el Santo Grial. Entras y al principio te sentis medio descolocado, cauteloso y con el pasar del tiempo te vas aclimatando.
Comence a conocer a su familia. Una familia trabajadora formada por Doña Marta (mi suegra) y sus diez hijos, 7 mujeres y el resto varones, algunos ya no estaban en casa, los mas grandes.
A Don Sigfredo no pude conocerlo. El destino y el cigarro se lo llevo con un infarto un año antes de caer yo a estas vidas.
Los planes de la conquista no serian para nada facil y a partir de alli, convencer a todo el parentesco, de que quien suscribe la presente, era buena persona, decente, con valores, principios, algo de moral virgen con toques de inocencia y que tenia buenas intenciones para con la piba, se transformaria en una verdadera cruzada epica llena de dragones, ogros, ciclopes, sapos culebras sin ningun hada que pudiera tirarme una mano y con la Santa Inquisicion pisandome los talones.
Doña Marta es una mujer sumamente catolica y ya de por si, mi cierto ateismo criado y alimentado en mi paso por un colegio privado catolico hacia que nuestras charlas sobre religion sean algo extrañas, pero no por eso aburridas. En un principio, uno da razon a todo. Estas de visitante. Te lees un poco del viejo testamento, te anotas unos cuantos Via Crucis en la iglesias para Semana Santa, compartis un sermon (o varios dependiendo del porder de negociacion), unos cuantos Aves Marias y para cerrar el Padre Nuestro. El Gloria siempre me costaba y me perdia en medio del rezo. Punto menos para Alberto, pero compenasaba con la del Angel de la Guardia para evitar ser quemado en una hoguera en el patio de la casa de mi amada.
Mirna era la mayor (bue sigue siendo) y metermela al bolsillo ha sido un trabajo de guante blanco. Era como convercer a una orda de cientos de canibales que vos sos mas amargo que la carqueja y que en su dieta no coincidias.
Era la que ponia limites y generalmente se activaba a partir de las 23:00, cuando yo estaba en pleno apriete en el living con la luz apagada y desde detras de una puerta soltaba aquel temido: "¡Frida, son las 11 ya! " (no iba a ser tan rigida diciendo "Son las veintitres". Ahi me tiraba del barco). "¡Frida son las 11:30!", "¡¡FRIDA, SON LAS 12:00!!" y asi psicologicamente me iba maltratando para rajarme. No le daba bola a los mocosos y a la hermana habia que cuidarla.
Karina era de mi promocion, todo ok, Pedro y Maria Daniela, buena onda y Luis el menor de todos un pibe chiquito que no aportaba riesgo alguno.
Sandra es la otra de las mayores. Seria y firme como teta de estatua no mostraba simpatia alguna. Si algo me quedo en claro, es que para ella en anatomia, el Risorio de Santorini y los Cigomaticos no existian. Nunca sabias si la onda era buena o mala. Dejarle en claro mi interses por su hermana me llevo aproximadamente unos tres años. Lo recuerdo, fue una noche, cuando su bebe lloraba a diestra y siniestra por no tener chupete, objeto que sali a comprar a la farmacia mas cercana mas o menos a las 0:00 horas de no se que dia en una bicicletita que casi me rompe los ligamentos de la rodilla por ser tan chica. Un mono de circo era lo mas parecido a mi aquella noche, pero nada me detuvo en el recorrido hacia la farmacia hasta conseguir el preciado tesoro de Babelito.
Asi me la gane. A sudor y pedaleos.
Sigfredo Jr. estaba ya casado asi que por consecuencia el tenia problemas mas interesantes que resolver que cuidar a su hermana y espantar un flaco de un metro noventa.
Fabio, en aquel momento cartero del Correo, estudiaba agronomia y me descolocaba con sus opiniones. De estampa fortachona, culto y gustador de la buena musica era raro como lenteja rellena. No me daba bola directamente. El estaba en otra.
Con tantas personas viviendo en esa casa, era casi imposible no mandarse bloopers como aquella vez que abrace por detras a una de sus hermanas pensando que era mi chica (siempre con las menores. una mayor me habria costado la vida).
O sentir cierta incomodidad por pensar que de reojo vi a la mayor en bolas cuando en realidad tenia puesta una calza horrible de color mostaza pero que se confundia con el color de su piel.
Cierta vez, Mirna habia comprado su televisor color, no recuerdo la marca pero la tecnologia innovadora habia llegado a la casa y habia puesto el "timer" al alcance de sus manos. Pero como son mujeres, simple, saber que era el timer era lo de menos siempre y cuando se vea algo, todo bien.
Es ahi cuando quien suscribe aportaba momentos de horror y dramatismo, suspenso sacado de la galera al mejor estilo Narciso Ibañez Menta dandome los tentaculos del pulpo negro sediento de venganza para matar a algunas victimas de miedo total.
Con cierto anonimato configuraba el timer a una determinada hora de la madrugada, por ejemplo 3:00 a.m. seleccionando un canal y un volumen determinado y su posterior apagado a las 3:01. Esto causaba consternacion. Duraba solo un minuto. Todavia no habia salido el film "El anillo" o el "El Aro". Tendria que haber patentado la historia. Se prendia y su pantalla con imagenes o la popular niebla se instalaba por un minuto para luego apagarse. Mi mente criminal estaba ahi, lista para jactarse de la cruel venganza en contra de mis adversarios.
Esta treta la hago tambien cuando paro en un hotel y dejo la habitacion. Dejo su timer configurado para una hora asi. Es un vicio que me da cierto placer enfermizo como sacarse los mocos de la nariz, hacer bolitas y pegarlos en alguna esquina o debajo de la silla. Uds. imaginense el resto.
Y aqui paro de contar, porque se iria el resto de mi vida en anecdotas, pero la cosa no termina ahi, sugiero urgente que antes de ponerse de novios, casarse, tener hijos, piensen que si de 10 cuñados se trata, por atras hay unos 30 sobrinos a los cuales obsequiar en su cumpleaños. Si a este numero le agregamos los cumpleaños de los compañeritos de primer grado de mi hija que son otros 30, estariamos alrededor de 70 sin tener en cuenta los Dias de la Madre, del Padre, del Niño, Navidad, Reyes, propios o ajenos porque aparte tienen el gen de Madre Teresa de Calcuta, caprichos varios como revistas, dvds, juguetes y otras yerbas, dicha situacion para un ser normal de clase media en epoca de inflacion e inestabilidad economica suele tornarse en un terrible calvario de "sanguchitos" de jamon y queso, chizitos, globos reventados y remeras manchadas con merengue por manos de lactantes enloquecidos por Sportacus y el Discovery Kids
Recapaciten.
Indaguen.
Pregunten.
No se apresuren.
