CARA DE "ME SECUESTRARON A ANITA"
¿Porque elegimos el dolor, el sufrimiento, el padecimiento? Resulta que somos amante de la tragedia. Este pibito galan, pasion de mujeres solteras y casadas, ancianas, jubiladas, adolescentes descuidadas y esposas amantes de telenovelas, tiro al piso, gracias a la direccion, el libreto o los productores, al verdadero hombre heroe rescatador de mujeres. Mientras Bruce Willis (en Duro de matar) corta en pedacitos con un cuchillo y un tenedor de plastico del servicio de larga distancia de alguna empresa de transporte, al terrorista mas despiadado del universo criminal; mientras Denzel Washigton (Hombre en llamas) usa una carga explosiva como supositorio para insertarsela en el recto (podria haber dicho culo, pero me gusta la palabra recto, suena como mas profesional, digamos, mas academico) al jefe de policia corrupto para que confiese; o Liam Neeson (Busqueda Implacable) dispara, corta, secciona, quiebra, dobla, retuerce y electrocuta a sus enemigos para dar con el paradero de su unica hija mientras recibe y aguanta como un hombre bien bien hombre; balazos, cortes juliana en el cuerpo, uno que otros bifes y afines; el chaboncito argentino, escalador de cimas, galancito sacha hippie amante de la naturaleza, se la paso llorando desde principio a fin, cayendo en los absimos de la humillacion frente a un enemigo desarmado, burlesco, salido de la epoca medieval y competidor directo con un bufon de la epoca, personaje interpretado por Juan Gil Navarro.
La cosa es, si vos estas en igual de condiciones contra el villano que daña tu familia, ¿no lo rebanarias con una cortadora de fiambres desde la punta de los dedos hasta el codo minimo para que confiese? ¿No saldria acaso el salvaje oculto que con la fuerza de un fiera herida trata de salvaguardar el bienestar familiar?.
_ Las visitas de niños recien nacidos son como pequeños aspirantes a medicos cirujanos frustrados. No paran de llenarte de cosas como verle rasgos heredados de figuras familiares ancestrales. Al final uno termina armando un pequeño Frankestein con chupete, al cual solo les faltan las costuras de las cicatrices y los bulones en la sien. Que el ojo del tio, que la mano del padre, que los rulos de la abuela, que la pera de juan pindonga, ¡ah! y las uñas... ¡como se parecen a las de Rosita!!! ... ¿te acordas como nos arañaba cuando no le queriamos devolver la pata larga?.
_ Las cosas de un velorio. Si el difunto es popular, viene gente impensada. Por eso no me gusta que la gente se muera. Por el simple compromiso adquirido inocentemente. Ir a un lugar a charlar con gente que uno ni ahi, a inventar conversaciones en una situacion donde el espectro de la tematica es totalmente reducido o casi nulos, es una hazaña. Hay que ser un crativo para salir de la rutina funeraria, del clasico "¡Cuanto lo siento!" o "¡Mi mas sentido pesame!". No da para charlar de futbol, a mi no me gusta. Ni de economia, menos hablar de mujeres, que a mi si me gustan. Pero el lado positivo de la partida de alguien es la reunion. El reencuentro. Algunas familias solo se juntan en esos eventos desafortunados despidiendose al final de todo con un sadico "¡Chau viejo, nos vemos el proximo velorio!". Tambien me paso ir a un velorio piola, simpatico, donde todos se cagaban de risa, menos el finado. No se si por los nervios o que. Pero habia buena onda.
_ Pense que el habia alcanzado el pinaculo de la humillacion cuando quise patear una pelota de futbol como si supiera, en actitud de defensa clavandola en al angulo del arco donde no debia. A cualquier lado. Desviada hacia donde nadie quisiera desviarla y cometer el error mas infantil que un supuesto futbolista (porque me considero totalmente supuesto) podria cometer ante la mirada inquisidora de todo el equipo de futbol cinco y que por respeto al hombre mayor (porque ya me estan trantando de ud. y eso tiene dos puntos mas en el ranking de las cosas humillantes personales) no me putearon por boludo. Pero no, me di cuenta que parte del papanatismo cronico tira las fichas en mi contra y me pone en la vidriera de la exposicion lamentable y patetica.
La cosa es que una mujer de llamativas boluptuosidades, con ciertas curvas y contracurvas, peligro media calzada y de caminar sinuoso saluda desde el frente dirigiendo el punto de vista hacia mi posicion, saludo que es respondido sin dudas y con la gracia de un pavo real por quien suscribe la presente.
Pero la desazon, el martillazo en el dedo meñique, el golpe doloroso del codo en el borde de la mesita de luz, la jana de la humillacion clavada debajo de la uña, devela una vez mas, que ya uno esta para el churrete, que ya somos mayorcitos responsables y que las actitudes tipicas de adolescente enajenado por excesivos niveles hormonales ya no nos corresponde como uno quisiera; cuando a mis espaldas escucho una voz masculina que responde milesimas de segundos despues un, por ejemplo "¡Chau Graciela! ¿como andas? y ¿Marito?."
El dia se hace noche, el galanterio pavote se derrite como un viejo casette abandonado en un descuido, en la luneta de un ford taunus. Los segundos se hacen horas. Espacio/tiempo pareciera detenerse quedando uno atrapado en el circo mundano de las metidas de pata sin poder escapar. Un simple pingüino (me hubiera gustado poner pajaro bobo, pero es muy autocritico) empantanado en el petroleo del mar de la papanatez absoluta e incivil y cuya una accion posible es caminar mas deprisa, doblar en la esquina mas proxima o meterse uno, en una farmacia a pesarse por $1.
Obviamernte que si hubiera sido un tipo cualquiera todo esto hubiera terminado en una frase de superacion interior como :"¿Quien carajo es este boludo?" o "¿Quien sos vos? ¡GIL!
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