Detalle de mi pequeña guerra personal contra la mediocridad de los mortales que habitan los alrededores. Diatribas urbanas, experiencias gastronomicas, vivencias paternales, audacia marital, superviviencia laboral, excelencia sexual. Un lugar sin censuras ni derechos humanos, ni piquetes o marchas, sin bombas de estruendos o mentiras politicas.
miércoles, 3 de noviembre de 2004
Pasajeros en trance, una dia de gente comun...
Hacia mucho calor.
Martes medio dia y la gente se congregaba en los sitios acostumbrados, acompañados de claveles rojos y retorcidas calas. Algun zumbido de abejas, que atraidas por el dulce aroma fragil del nectar, revoloteaban entre la gente y las flores.
Un dia de almas perdidas pidiendo por almas perdidas.
Un Noviembre cualquiera sobre el colectivo que me lleva mas alla del cementerio.
En un principio mi camara y yo jugabamos delirantemente a sentir que ven los que estan fuera de mi cuerpo.
Fue alli que la vi.
Un rostro centrado mas alla de la ventanilla diminuta y ruidosa del coche. Una mirada. Una percepcion.
La gente pasa.
Fue ahi donde senti eso que creo sienten todos, en algun momento de la vida en micro, sobre la curiosidad sobre la persona sentada alli cerca, esa persona que jamas volves a ver salvo mera casualidad, en el purgatorio o en otro confin celestial.
Senti por ese instante esa curiosidad de mirar, de observar, de tratar de sentir ese no se que que te lleva a quere conocer.
Al fin de cuentas solos venimos al mundo y solo nos vamos. Un misterio excitante y decadente a la vez.
Una mirada oscura y pensativa se escapaba por esa rendija de la ventana inmovil y cautivante hacia algun lugar mas alla de lo conocido. Amor, odio, preocupacion, tension, rutina o simplemente, contemplacion del pasaje, de lo visto. Una especie de pelicula en blanco y negro pasando ante tus ojos en esos kilometros ciudadanos de recorridos suburbanos tratando de sacarte de la realidad aunque sea en esos metros preciados para olvidar, para dejar de existir unos minutos, para ser, para imaginar, para soñar, para volar a quien sabe donde en busca de eso que sueña y no encuentra en la realidad.
Un colectivo, un micro, submundo urbano, universos desconocidos aproximados donde solo la orbita como contacto lejano toca nuestros sentidos.
Somos tantos y estamos tan solos que no nos damos cuenta.
Alguien dijo por ahi que nos hacemos de amigos quizas para que quede alguna constancia de nuestro paso por aqui.
¿Quien sabe?...
Yo, ella, el, vos, todos, congelados en alguna imagen. ¿De quien?... No se... ¿alguna vez te lo preguntaste?... Se que si....
Esa imagen queda, en ella queda alguien, vos quedaste en la imagen de alguien que alguna vez se pregunto lo mismo que yo, ese fugaz momento de sensibilidad, distraccion o atraccion por lo desconocido por conocer.
Una vida en blanco y negro.
Una historia.
Una historia de gente comun...
Como vos... Como yo...
Como todos.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario